Altea
"lugar de propiedades curativas"
para los griegos, y, "atalaya" para los árabes,
es hoy en día una comunidad multicultural en la que
conviven pescadores y marineros de una tradición
centenaria con turistas nacionales e internacionales.
A la orilla del Mediterráneo, protegida por la
Sierra de Bernia, nos encontramos con La Perla
de la Costa Blanca. Esta localidad alicantina,
al norte de la Marina Baja, es el lugar desde
el que opera Flying Fish Tours. Además de
entregarle su nombre a la compañía, nos ofrece
un paisaje de casas encaladas que perdurará
para siempre en la memoria del viajero.